Sabemos que el feedback es una de las herramientas más útiles para identificar áreas de mejora y de crecimiento. Ya hemos hablado en este
espacio de cómo darlo… pero… ¿y si el que lo recibes eres tú?

Dependiendo de cómo te lo planteen, lo puedes percibir como una crítica y pasar de largo, o verlo como una oportunidad de mejora y entrar en acción.

La clave es valorar esa conversación de una forma positiva y con mente abierta.

El fin último de dar y recibir feedback es mejorar el desempeño, ya sea potenciando comportamientos positivos o eliminando negativos.

Cuando te dispongas a recibir feedback ten en cuenta una serie de consejos que te contamos en este vídeo: